miércoles, 20 de febrero de 2013

SUEÑOS DEL ALMA

Me declaro soñadora. Una soñadora particular, porque no es que me la pase en las nubes como se podría pensar. Soy una soñadora porque creo que los sueños con alma, TODOS, se pueden hacer realidad, y mi sueño realmente es que todos los soñadores despierten para que sus sueños con alma cobren vida propia. Este es mi sueño.


Los sueños con alma son esos sueños que surgen como una urgencia o un llamado.  Son sueños que cuando son contados hacen brillar los ojos de quien los cuenta y de quien escucha.  Los sueños con alma danzan en nuestro corazón y en nuestra cabeza, aletean llamando nuestra atención y cuando se la ponemos se llenan de felicidad y jubilo, se hacen grandes y se van llenando de vida. 

Los sueños con alma ya traen la semilla de la manifestación,  pero necesitan la fe del soñador, su constancia y su entrega, de lo contrario pueden morir de inanición, de aburrimiento o desesperanza. 

Mi sueño es que nuestros sueños crezcan y se manifiesten en nuestra vida cotidiana. Darnos el permiso de soñar es darnos la posibilidad de crear una mejor realidad para nosotros y quienes nos rodean, es darle razones al alma para crecer y creer y abrirnos a la aventura de vivir la magia que el mundo del ensueño nos regala.

Hoy tómate un tiempo para escuchar el susurro de lo que sueñas, siente como los sueños te reclaman y te llaman porque quieren nacer. Escoge el sueño que más te haga vibrar,  él te guiará para que se pueda dar.  Solo escucha, escucha muy bien, sin expectativas, suéltate a lo que él trae para tí, que no necesariamente es como tu quieres que sea, (usualmente es mejor) y dale la libertad para que habite en tí.  Escucha bien, porque si ya te está habitando, tu cuerpo empieza hablar y va a querer expresarse cada vez con más fuerza. Dale la bienvenida y empieza a actuar, sintiendo. Escucha lo que tiene para decirte sobre cómo hacerlo realidad, confía. Este es apenas el inicio.